El síndrome postvacacional, al contrario de lo que se pueda pensar, no sólo sucede en adultos, si no que además se da en la población infantil entre un 5% y 8%. Tristeza, apatía, irritabilidad, nerviosismo, labilidad emocional son algunos de los síntomas a causa de este síndrome y de los más frecuentes.

Y no sólo son esos síntomas, sino que además a los que se les suma en los días previos a causa del inicio del colegio son malestares físicos como dolor de cabeza, molestias intestinales, dificultades para dormir, falta de apetito etc.… No se trata de una enfermedad, pero, su duración oscila entre 3 y 15 días, y es suficientemente manifiesto en nuestros hijos como para no ser pasado desapercibido.

 

Causas del síndrome postvacacional en los niños

Una de las principales causas es que a los niños les costará adaptarse al cambio de rutinas. Su escasa independencia en la gestión de la conducta y regulación de las emociones provoca que se adhiera a lo conocido y practicado como forma de obtener seguridad y sensación de control.

Y no sólo eso, lo practicado durante las vacaciones tiene un alto componente que refuerza el síndrome: mucho tiempo de ocio, diversión y juego, actividades al aire libre, con flexibilidad en normas y límites, cercanía familiar, falta de obligaciones… Y el cambio causa una pérdida de todo lo vivido durante las vacaciones. Para ellos es muy duro pasar del modo de vacaciones modo de trabajo.

Por otra parte, la vuelta al cole cuenta con la incertidumbre de enfrentarse a algo novedoso, salir del entorno seguro que es el entorno familiar y entrar en un ambiente totalmente nuevo: desde espacios nuevos, normas a aprender, responsabilidades, nuevos adultos, relaciones nuevas y dinámicas, compañeros nuevos…

También es cierto que cada niño es un mundo y no todos los niños reaccionan igual y que la capacidad de adaptación depende en gran medida de su personalidad, pero las actuaciones del entorno tienen una gran influencia.

Consejos para no tener estrés postvacacional

Es por todo esto que desde Elite Psicólogos ofrecemos algunos consejos muy buenos para facilitar la vuelta al cole y que sea más llevadera:

1. No realice el cambio brusco; empieza de forma progresiva. Un buen hábito antes de la vuelta al cole ordena el cerebro infantil y le disponen mayor flexibilidad para la nueva tarea esperada.
2. Ajusta poco a poco la hora de irse a la cama. El humor de un niño mejora con el descanso. Es recomendable poner una actividad tranquila un poco antes de irse a dormir y ser paciente las primeras noches. El cerebro infantil tarda un poco en acostumbrarse.
3. No suprima todas las actividades lúdicas de golpe que compartía. Es cierto que se deben preparar muchas cosas y organizar, pero bajo ningún concepto su hijo debe pensar que en el cambio incluye perderle también a ti.
4. Es buena idea programar encuentros con los amigos de su hijo antes de iniciar el colegio. La familiaridad afectiva y social reducirá el estrés del primer día de colegio.
5. Es buena idea mantener algunos privilegios de las vacaciones los fines de semana; pasear en bicicleta, ir a la playa, salir al campo, preparar una velada de cine en casa… Lo bueno no debe terminar, aunque se vuelva a la rutina de trabajo.
6. No regañe a su hijo por expresar las quejas, sea comprensivo, realmente todos preferimos seguir de vacaciones.
7. Haz que su hijo participe en la preparación de los materiales para el colegio. Mostrar entusiasmo y permitir personalizar eligiendo los colores que le gusten o los grabados de sus personajes preferidos van a ayudar mucho la vuelta al colegio.
8. Si fuese necesario, permita que su hijo lleve algún objeto de apego los primeros días. Desde un juguete pequeño o que lo acompañe en el camino su mascota son detalles muy importantes que aportan seguridad en la infancia.
9. Muestre tranquilidad y sea muy optimista y no haga las despedidas largas en el colegio. Si su hijo es tímido o pequeño, déjelo junto al adulto de referencia de su clase, a un amigo o una actividad que le gusta servirá de distracción positiva para los primeros momentos. No dude en ofrecer toda la información necesaria sobre su hijo al profesor/a para que lo tenga en cuenta y facilite un buen vínculo y adaptación.
10. Las recogidas a la salida son muy importantes. Siempre es recomendable, en la medida de lo posible, que uno de los progenitores pueda estar en los primeros días y permitir que el niño/a se de cuenta que no nos hemos olvidado de él. De esta forma, podrá demostrar mediante una sonrisa que ha superado esta “super prueba”. Por otro lado, el niño/a al comprobar que nos relacionamos con sus profesores va a facilitar el aprendizaje social.

 Cómo minimizar el estrés postvacacional

Todos estos consejos pueden resultar muy útiles para minimizar los síntomas del síndrome postvacacional y facilitar de esta forma la vuelta a la rutina, hemos de saber que es de vital importancia no empezar los días con estrés, de eta forma sabremos como alcanzar la felicidad en el niño pese a la vuelta al cole. Es por ello por lo que es de vital importancia despertarlos son estrés, desayunar con calma y sin regañinas y tiempo suficiente para ir tranquilos es importante para el proceso de adaptación. El estado de ánimo de los adultos que rodean al niño es importante para así amortiguar y regular el estrés del niño/a.

Si bien todos estos consejos pueden resultar útiles para minimizar los síntomas del síndrome postvacacional y facilitar la vuelta al cole, hemos de saber que es fundamental que nuestros días no empiecen con estrés. Por ello, despertares tranquilos, desayunos sin regañinas y tiempo suficiente para no ir con prisas se convierten en claves imprescindibles para el proceso de adaptación de nuestros hijos. Sepa que el estado anímico del adulto es fundamental para amortiguar y regular el estrés adaptativo del niño.

Si está pasando por estrés con la pareja y quiere saber como salvar un matrimonio en crisis, debe saber que existen antidepresivos sin receta y un buen apoyo por part de un profesional puede ayudar.. La vuelta a la rutina es muy dura para todo el mundo, y en especial, para las parejas y los hijos, todos debemos cuidarnos y ayudarnos a superar estos obstáculos en familia.