Existe diferentes apegos y tipos de apegos, vamos a intentar profundizar en ellos para que queden bien claros.

Antes de empezar, queremos aclarar que esto es muy importante, ya que son los primeros vínculos de nuestra vida.

Los cuales, son por lo general hacia nuestra madre o padre y, a partir de ahí, van evolucionando y extendiéndose a otras personas.

Si hemos tenido problemas en la niñez o detectamos que tenemos carencias en este sentido, nuestro desarrollo no será el correcto. Nosotros, ofrecemos todo tipo de asesoramiento al respecto, buscando siempre la raíz del problema. Y, para comodidad de nuestros pacientes, ofrecemos asesoramiento online.

¿Qué es el apego y cuáles son sus tipos?

Este sentimiento, es la relación afectiva más íntima, importante y profunda que podemos establecer en nuestra vida. Como hemos explicado, la primera que tenemos es hacia nuestras madres y, poco a poco, vamos extendiéndola hacia las personas que cuidan de nosotros.

Ahora, vamos a explicaros todas las clases que existen, los cuales están divididos en cuatro grupos:

Apego seguro

Está caracterizado por la incondicionalidad de que el niño sabe que su cuidador no va a fallarle. Se siente querido y valorado en un ambiente de amor y aceptación.

En consecuencia, se manifiestan comportamientos más activos, se interactúa con mucha más confianza y hay una mayor relación con los demás. Es de los más positivos que existen, ya que todo esto se traslada a la adultez.

Apego ansioso

A diferencia con el anterior, este es la contraparte. Se tiene una sensación constante de inseguridad y tiene precaución con cada aspecto de su vida.

Si no se cuida, puede llegar a crear una dependencia emocional hacia sus figuras paternas, convirtiéndose en un trastorno de apego reactivo

Apego evitativo

Los niños que sufren este tipo de situación, asumen que no se puede contar con el cuidador y por ello sufren mucho. Ya que no generan seguridad y puede llegar a causar distanciamiento social.

Es importante en estos puntos buscar ayuda para los padres que, a través de terapia, puede mejorar la relación con su pequeño.

Apego desorganizado

Es una variante entre el ansioso y el evitativo, el cual da un resultado de carencia total. Es muy negativo, ya que se tiene una tendencia más destructiva, impulsiva y con grandes dificultades para relacionarse.

Como hemos podido comprobar, hay muchos apegos y tipos de apegos, tanto positivos como negativos. Debemos de identificarlos y, en caso de sentir que estamos en uno negativo, intentar buscar ayuda profesional.

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