Desde ElitePsicólogos, te contamos cómo dejar una amistad tóxica para que así puedas seguir con tu vida y, además, aprender a reconocer este tipo de malas relaciones. Y es que, en más de una vez te verás en una situación de relación amistosa que no son equilibradas ni son recíprocas, en estos casos, es importante hacerse a la idea de que igual es el momento de poner punto y final a la situación ya que pueden hacer mucho daño.
Características de una amistad tóxica
Si te estás preguntando si estás involucrado o involucrada en este tipo de situación, te vamos a dar una serie de características principales para así diferenciar las que merecen la pena conservar de las que no.
Están contigo pero sin estar
A veces, la presencia física de una persona no nos da la compañía que realmente necesitamos, es más, puedes llegar a hacer planes y sentirte solo. Pues bien, cuando estamos con un mal amigo o amiga, no se preocupan por conocerte, sólo te quieren para que estés con ellos y aceptes todo sin cuestionar nada.
Los amigos son un importante refuerzo de nuestra autoestima, según un estudio.
Sólo ven tus defectos de forma despectiva
Si conoces a una persona que señala tus defectos de forma despectiva y poco constructiva, es probable que te hagan sentir mal y que no nos aporten solución. Las buenas amistades, señalarán nuestros defectos pero de una manera más positiva y constructiva.
Te quitarán protagonismo
Algunas personas demandan atención de forma continua, y cuando la atención es para nosotros, no lo toleran. Cuando una persona no permite nuestra proyección, es importante que lo tengas en cuenta.
¿Cómo terminar una relación tóxica?
Si has revisado alguna de las posibles características y te estés dando cuenta que esa persona no te aporta nada, es el momento de que empieces a revisar algunas formas efectivas para dejarlas de lado.
Pon límites
Pon tus límites, conoce las cosas que no estarás dispuesto a negociar, debemos empezar a conocer nuestros ideales y principios y no ceder ante ello. Es uno de los pasos más importantes, pues poniendo límites en nuestros intereses es cuando empezarás a sentirte mucho mejor.
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Aprende a ser asertivo
Cuando decimos las cosas con claridad nuestras decisiones, vas a empezar a sentir paz. Tienes que aprender a no reprimir tu necesidad de apartarte. Además, esto debemos decirlo poniéndonos en el lugar de la otra persona y entender de este modo que puede no estar de acuerdo con la idea de que te apartes un poco. Ahora bien, debemos ser firmes en esta idea y decisión, sé breve, conciso y respetuoso explicando nuestros motivos.
Habla con otra persona antes de decírselo
Para evitar hacer daño a la otra persona, es importante desahogarse con otra persona, de este modo estaremos menos tensos y podremos decir lo que pensamos evitando emociones incontrolables y siendo más tranquilos.
Respeta la opinión de la otra persona
Debes entender que es probable que la otra persona no piense como tu, es por ello que es importante que estés preparado para que no esté de acuerdo y es algo que debes aceptar, eso sí, no cambies de opinión aunque esté en contra.
Como puedes comprobar, es importante poner límites y los pasos son relativamente sencillos.
Esperamos que te haya sido de gran utilidad y te sirva para empezar a tener relaciones más sanas. No olvides visitar nuestro blog sobre psicología, en él encontrarás los mejores consejos para tu día a día.