El término astenia proviene del griego el cual significa falta de vigor, fuerza y fortaleza. Esta falta de fuerza es física y mental, se manifiestan mediante el sistema nervioso y muscular. Se mantiene una sensación de debilidad, donde hay alteraciones del estado general: cansancio intelectual, dificultad para concentrarse, trastornos del sueño, alteraciones en el apetito y en la memoria.
Desde el punto de vista fisiológico se concibe la fatiga como el cansancio a consecuencia de algún esfuerzo previo. La astenia es el mismo cansancio, pero sin esfuerzos que la justifiquen
“Se presenta especialmente entre los 20 y los 50 años, y adquiere una mayor prevalencia entre mujeres que entre varones. A veces aparece como síntoma de otras enfermedades como la depresión o la anemia”
Síntomas de la Astenia
- Desfallecimiento, falta de fuerzas, necesidad de descanso ante tareas que anteriormente no lo necesitaban
- Debilidad generalizada, sensación anticipada de cansancio dificultad para empezar y continuar la tarea
- Fatiga mental, falta de concentración, alteraciones en las emociones y labilidad emocional.
- Irritabilidad, ansiedad
- Cansancio y somnolencia
- Cefaleas
- Pérdida de apetito
- Disminución de la libido
- Falta de motivación
Causas de la Astenia
La astenia se le asocia en gran medida a consecuencia de múltiples malestares psicológicos tales como ansiedad, tristeza, frustración, estrés, depresión, y, al cáncer y los distintos tipos de tratamientos. Entre la totalidad de las causas se engloban:
- Causas psiquiátricas Trastornos de ansiedad, trastornos alimentarios y depresión
- Causas psicosociales: Sobreexigencia psicológica y social, estrés laboral, problemas familiares (duelo, enfermedades, separación, mudanza, pérdida de empleo, jubilación)
- Alteraciones del sueño: Interrupciones frecuentes como la lactancia. Cantidad o calidad del sueño alterada
- Fármacos: sedantes, hipnóticos, opioides, anticonvulsivantes. Abuso de alcohol u otras drogas, abstinencia
- Causa metabólica: Hipotiroidismo o hipertiroidismo, insuficiencia o hiperfunción suprarrenal, diabetes.
- Causa inflamatoria: infecciones (tuberculosis, endocarditis, hepatitis, HIV, virosis crónicas, absceso oculto, etc) y enfermedades autoinmunes como el lupus, cáncer y sus tratamientos correspondientes
Como prevenir la Astenia
El riesgo de sufrir astenia puede reducirse si se mantienen hábitos alimenticios saludables, no saltarse comidas. Mantener un horario del sueño regular y en un intervalo adecuado. Realizar ejercicio físico. Sobre todo, es primordial hacer el esfuerzo mantener los buenos hábitos a pesar de situaciones estresantes, no dejar de lado la salud mental y física, aunque se esté vivenciando circunstancias retadoras, tales como el estrés laboral o problemas personales.
Tratamientos de la Astenia
Terapia cognitivo conductual:
Esta especialidad es de gran ayuda para enfrentar este padecimiento, mediante la misma se ayuda al individuo a:
- Identificar y reestructurar creencias que generen reacciones emocionales que influyan en la astenia o que refuercen patrones de conductas desadaptativos.
- Dar paso a las emociones como tristeza, culpa, rabia, miedo, ansiedad y todas aquellas que generen malestar en el individuo.
- Enseñar al individuo a identificar aquellas situaciones que sean fuente de estrés para lidiar con ellas de forma paulatina, evitando los efectos adversos como la astenia.
- Generar actividades y planes alternativos donde pueda centrarse en lo que puede hacer y no en lo que no puede, de esta forma incentivar la motivación. Programar un plan de actividades y descanso según su nivel de energía para poder optimizarla.
- Planear actividades con objetivos simples y realizables. Establecer una prioridad en las actividades, realizar las más importante cuando haya menos cansancio. Identificar aquellas que generen más cansancio y desarrollar estrategias para contrarrestarlo. Realizar actividades gratificantes y que favorezcan el prestarle atención. Programar las actividades cotidianas y hacer ejercicio físico respetando los límites del cansancio y la debilidad.
- Entrenar a la persona para enfocarse en pensamientos alternativos además del agotamiento, así descentrar la atención mental al cansancio.
- Crear una buena higiene del sueño, es decir hábitos saludables antes de dormir para que pueda descansar de forma plena.
Neurofeedback y Brainspotting para la Astenia:
Estas forman parte de la terapia psicológica. Son de las más modernas, no invasivas, caracterizadas por su efectividad en pocas sesiones. Su objetivo es intervenir en el funcionamiento de la actividad cerebral, específicamente en las áreas asociadas al malestar o la condición que le ha generado dificultades al individuo en su vida. En este sentido optimiza el funcionamiento cerebral revirtiendo los síntomas negativos, en este caso de la astenia.
Somos psicólogos expertos en España en tratamientos de la astenia
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